OEA destaca normalidad en jornada electoral ecuatoriana y pide transparencia


Ecuador

La Organización de Estados Americanos (OEA) observó con buenos ojos el desarrollo de la segunda vuelta presidencial en Ecuador. Según Heraldo Muñoz, jefe de la misión de observación y excanciller chileno, las primeras seis horas de votación transcurrieron con “normalidad” y “tranquilidad”, sin incidentes significativos que empañaran el proceso.

En su recorrido por el Colegio San Gabriel, uno de los centros electorales más concurridos de Quito, Muñoz señaló que se registraron algunos episodios aislados, ya documentados en el informe preliminar de la misión. “Lo esencial es que la ciudadanía ejerza su derecho al voto. Si hay transparencia y vigilancia —por parte de los partidos y los observadores internacionales— eso anula cualquier intento de fraude”, afirmó.

La declaración llega en medio de temores de que los candidatos insistan en narrativas de fraude, como ocurrió tras la primera vuelta. Frente a esto, Muñoz fue tajante: “Derrotar los rumores y las tensiones con más transparencia es la única forma de que el proceso fluya de manera democrática”.

El diplomático elogió el operativo de seguridad desplegado por las Fuerzas Armadas y la Policía, y recalcó que corresponde a los miembros de las juntas receptoras del voto y al Consejo Nacional Electoral (CNE) aplicar las reglas, entre ellas la inédita prohibición del uso de celulares en el momento de sufragar.

Esta medida fue implementada a petición del presidente y candidato a la reelección, Daniel Noboa, quien argumentó que el celular podría ser usado para evidenciar el voto y facilitar extorsiones. En la primera vuelta, Noboa denunció —sin pruebas— que bandas criminales presionaron a votantes para que favorecieran a su rival, la correísta Luisa González.

Muñoz hizo un llamado a la ciudadanía a esperar con calma los resultados oficiales y a no dejarse llevar por encuestas a boca de urna. “Hay que contar cada voto. La única estadística que importa es la del escru

Enfatizó además la necesidad de garantizar el control electoral, particularmente en las zonas donde rige un estado de excepción decretado por Noboa. Estas incluyen nueve jurisdicciones, entre ellas Guayas, Los Ríos, Manabí y el Distrito Metropolitano de Quito. En esas regiones se restringen derechos como la inviolabilidad del domicilio y se aplica un toque de queda nocturno, excepto en la capital.

El jefe de la misión de la OEA también reportó que en horas tempranas hubo incidentes que impidieron el ingreso de delegados de los partidos a algunos recintos electorales, aunque la situación fue corregida.

Uno de los puntos sensibles del proceso ha sido la participación de Noboa en campaña sin haber solicitado la licencia obligatoria, como establece la ley ecuatoriana para autoridades en funciones que buscan la reelección. El mandatario argumenta que su candidatura no cuenta como reelección, dado que fue electo en 2023 solo para concluir el mandato de Guillermo Lasso.

A pesar de no haber pedido licencia formal, Noboa notificó al CNE los días que dedicaría a actividades proselitistas.

Muñoz adelantó que la misión de la OEA incluirá en su informe final una evaluación sobre la situación legal y ética de la candidatura presidencial en funciones.

Más de 13,7 millones de ecuatorianos están habilitados para votar en estos comicios, decisivos para el rumbo político del país. El resultado definirá si Noboa obtiene un mandato completo (2025-2029) o si el correísmo regresa al poder con Luisa González, quien podría convertirse en la primera mujer en la historia de Ecuador en llegar a la Presidencia.

Fuente: SWI

Artículo Anterior Artículo Siguiente

Sufragio El Podcast