Colombia
El Partido Liberal ha movido ficha en la carrera electoral rumbo a 2026. Este jueves, más de 22 congresistas de la colectividad liderada por César Gaviria radicaron ante la Secretaría del Senado un proyecto de ley que retoma elementos clave de la reforma laboral del presidente Gustavo Petro, la misma que fue archivada hace pocas semanas con votos en contra del propio liberalismo.
La nueva iniciativa, compuesta por apenas cuatro artículos, plantea ampliar la jornada nocturna y aumentar el pago por trabajo en domingos y festivos. Estos puntos habían sido el núcleo de la propuesta original del Gobierno, y son también los temas que Petro ha mencionado como ejes de una consulta popular que aún no tiene fecha ni preguntas concretas.
El documento fue dirigido a Diego Alejandro González, secretario del Senado, y lleva las firmas de senadores como Alejandro Carlos Chacón y Fabio Amín, así como de representantes a la Cámara como Dolcey Torres, Álvaro Monedero y Olga Beatriz González. En él se propone modificar el artículo 160 del Código Sustantivo del Trabajo, de manera que la jornada diurna termine a las 7:00 p.m. y no a las 9:00 p.m., como ocurre actualmente. Este cambio significaría que dos horas más del día serían consideradas nocturnas, con su correspondiente recargo salarial.
Además, el proyecto liberal propone duplicar el pago por trabajo en días festivos y dominicales, del 75% actual al 100%, en línea con la propuesta original del Ejecutivo. También incluye un llamado al Gobierno nacional para poner en marcha programas de generación y protección del empleo.
Con esta jugada, el Partido Liberal toma la delantera al Gobierno, se reposiciona frente a la opinión pública y se blinda ante las críticas de estar en contra de los derechos laborales. En la exposición de motivos, los parlamentarios aseguran que su proyecto busca “la dignificación y protección de los trabajadores en Colombia”. La dirección del partido acompañó con un escueto pero enfático comunicado: “Los dominicales, festivos y recargos nocturnos son un derecho, una obligación y una causa liberal. El proyecto brinda garantías y derechos a la clase trabajadora”.
Sin embargo, no todos celebran la movida. María Fernanda Carrascal, representante a la Cámara por el Pacto Histórico y una de las principales ponentes de la reforma que naufragó en la Comisión Séptima, no tardó en reaccionar. “El populismo y el cinismo en su máxima expresión”, escribió en su cuenta de X. La congresista criticó al liberalismo por apropiarse de una bandera que, según ella, no defendieron cuando tuvieron la oportunidad. “Ahora temen a la consulta popular, cuando han tenido más de 20 años para reivindicar estos derechos laborales”, afirmó.
Aún se desconoce la postura oficial del presidente Petro y de sus ministros del Interior, Armando Benedetti, y del Trabajo, Antonio Sanguino. No obstante, esta reforma exprés del liberalismo podría cambiar el tablero político. Por un lado, deja al Ejecutivo sin el monopolio de la bandera laboral, y por otro, debilita el argumento de impulsar una consulta popular si ya hay un proyecto legislativo con los mismos objetivos en trámite.
En cualquier caso, el pulso por el respaldo de los trabajadores ya comenzó, y el Partido Liberal se ha adelantado.
Fuente: Semana