A menos de dos meses para la elección del nuevo directorio legislativo, la diputada Vanessa Castro, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), ha oficializado su intención de disputar la presidencia de la Asamblea Legislativa el próximo 1.º de mayo, sumándose a la carrera contra Rodrigo Arias Sánchez.
En conversación con La Nación, Castro confirmó que su aspiración no es nueva, pues desde el inicio del actual período legislativo ha manifestado a sus compañeros de fracción su deseo de asumir el liderazgo parlamentario.
“Quiero ser presidenta y creo que reúno las condiciones para ello. En varias ocasiones, por diferentes medios, lo he expresado a mis compañeros y compañeras de fracción”, afirmó.
Con su anuncio, la socialcristiana se convierte en la tercera candidata en la pugna por la presidencia legislativa. Además de Arias, quien busca su tercera reelección, también ha expresado su interés el jefe de fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), Óscar Izquierdo.
Aunque Castro ha respaldado a Arias en los tres años anteriores y reconoce su gestión, considera que ha llegado el momento de una renovación en el liderazgo del Congreso.
“Un cambio de estilo, sobre todo a cargo de una mujer, sería muy relevante e importante. Se sumaría a la experiencia de don Rodrigo Arias un nuevo enfoque y una nueva cabeza al frente de la presidencia”, subrayó.
A pesar de la claridad con la que ha manifestado su aspiración, la jefa de fracción del PUSC, María Marta Carballo, negó el lunes pasado que dentro del partido existieran candidaturas oficiales para la presidencia del Congreso.
Ante este panorama, Castro enfatizó que su intención es ganarse el respaldo de sus compañeros y otras fracciones, convencida de que la presidencia legislativa debe construirse con diálogo y consenso.
“Para mí es fundamental cada uno de mis compañeros y compañeras, así como los y las diputadas de otras fracciones. Quien aspira a la presidencia debe recorrer los pasillos, escuchar inquietudes y construir acuerdos”, concluyó.
Con el escenario aún abierto y las negociaciones en marcha, la contienda por la presidencia legislativa promete ser una de las más disputadas de los últimos años.
Fuente: Nación
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