El canciller de Paraguay, Rubén Ramírez Lezcano, anunció hoy la retirada de su candidatura para asumir la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA), un movimiento que abre el camino para que Albert Randim, ministro de Relaciones Exteriores de Surinam, obtenga el respaldo de un bloque de países influyentes, entre ellos Brasil, Uruguay, Colombia, México, Chile y Bolivia.
El presidente de Paraguay, Santiago Peña, informó en un comunicado que la decisión se debía a un "cambio abrupto e inexplicable" en la postura de algunos países de la región que, inicialmente comprometidos con el apoyo a Paraguay, decidieron retirarlo. Peña no mencionó nombres específicos, pero dejó claro que esta situación no afectará la postura histórica y los principios de su país.
“El Paraguay, a lo largo de su rica historia, ha sido un país que siempre ha basado sus posiciones en principios elevados y valores, y no renunciará a los mismos por una elección o coyuntura particular”, señaló Peña.
Aunque el comunicado no fue explícito, las críticas implícitas parecían dirigirse a los presidentes de Brasil y Uruguay, Luiz Inácio Lula da Silva y Yamandú Orsi, quienes, según fuentes de Asunción, habían prometido inicialmente su apoyo a Ramírez. Sin embargo, Lula, en un giro geopolítico, se alineó con la candidatura de Randim, un movimiento que responde a la agenda estratégica de su gobierno en América Latina.
El cambio en el apoyo de Brasil se produjo en el marco de un encuentro privado entre los presidentes de Brasil, Uruguay, Chile y Colombia, quienes decidieron respaldar en bloque la candidatura de Randim, un diplomático que tiene una postura más dialogante hacia el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, en contraste con la postura más crítica de Ramírez.
Este respaldo a Randim consolidó su ventaja en la carrera por la Secretaría General de la OEA, con el apoyo clave de países como Brasil, Chile, Colombia, Uruguay y Bolivia. Además, otros países de la región, como Costa Rica, Ecuador y República Dominicana, también anunciaron su intención de votar a favor del canciller de Surinam.
La candidatura de Ramírez fue apoyada inicialmente por varios países de la región, pero el nuevo panorama geopolítico, con un enfoque más alineado con las posturas de izquierda en América Latina, favoreció a Randim, quien ya cuenta con los votos suficientes para ganar la elección el próximo lunes en Washington.
Randim, quien ha sido descrito como un diplomático con amplia experiencia, recibió elogios por su capacidad de enfrentar los desafíos de la región, ofreciendo una perspectiva renovada que refleja las realidades del Caribe y de América Latina en general.
A pesar de la clara victoria de Randim, la tarea del nuevo secretario general de la OEA será compleja. Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, ha cuestionado la relevancia de la OEA en el panorama geopolítico actual y no ha anunciado oficialmente si apoyará a Randim en la votación del 10 de marzo.
Este giro en los apoyos refleja las tensiones en la región y marca un cambio significativo en las dinámicas políticas dentro de la OEA, con implicaciones que podrían reconfigurar las relaciones internacionales en América Latina.
Fuente: Infobae
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