Panamá
El alcalde de Panamá, Mayer Mizrachi Matalón, ha compartido su visión sobre la transformación del Carnaval de la ciudad, buscando que para 2026 se convierta en un evento de talla internacional. En una entrevista, Mizrachi abordó temas como la organización de eventos masivos, el equilibrio financiero de la Alcaldía y los planes para mejorar la seguridad y la inclusión en los festejos.
Mizrachi apuesta por un modelo de carnaval organizado por la empresa privada, sin fines de lucro para el gobierno. Destacó que, en eventos previos como el desfile de Navidad, las empresas obtuvieron publicidad significativa a cambio de una inversión relativamente baja, lo que evidencia el atractivo del esquema. “Mi aspiración del Carnaval de la ciudad de Panamá es cancelarlo. Yo no quiero que haya un Carnaval de la ciudad de Panamá, yo quiero que haya un Carnaval internacional de la ciudad de Panamá para 2026”, enfatizó.
Dentro de las mejoras propuestas, el alcalde señaló la necesidad de hacer el carnaval más inclusivo para familias y niños, incorporando juegos inflables, columpios y otras atracciones. Además, anunció que por cada camión cisterna utilizado en los festejos, otro será enviado a comunidades que carecen de acceso a agua potable, una medida que ya está en marcha.
Desde que asumió su cargo, Mizrachi ha enfrentado lo que describe como “una hemorragia financiera” en la Alcaldía. Con un presupuesto de $231 millones y una deuda de $170 millones, su administración ha enfocado esfuerzos en recortar gastos, reducir dependencias y fomentar alianzas con el sector privado.
En materia de seguridad, el alcalde ha trabajado en la profesionalización de la Policía Municipal, integrándola mejor con la Policía Nacional. Se han graduado más de 200 nuevos agentes municipales y recientemente se incorporaron 25 policías ciclistas para reforzar la vigilancia.
Otro de los retos que enfrenta la Alcaldía es la problemática de los habitantes de calle. Mizrachi informó sobre la creación de un albergue en Panamá Este y una alianza con el Ministerio de Gobierno para habilitar otro en el centro de la ciudad.
Sobre el comercio informal, el alcalde afirmó que, si bien comprende la necesidad de los buhoneros, también debe garantizarse el orden y el derecho de todos los ciudadanos. En la Avenida Central, se han establecido kioscos organizados para los microempresarios, asegurando que operen bajo regulaciones establecidas. Esta estrategia se busca replicar en otras zonas como 24 de Diciembre, donde la proliferación de vendedores informales afecta el tránsito peatonal y la higiene pública.
Para los artesanos, Mizrachi anunció la construcción de un nuevo Mercado de Artesanías junto al Museo Reina Torres de Araúz, respondiendo a una promesa incumplida desde hace siete años.
Finalmente, el alcalde defendió la revisión y reducción de subsidios municipales, argumentando que algunos eran otorgados por amiguismo y que la situación financiera de la ciudad no permite ampliarlos. Su administración se enfoca en la sostenibilidad financiera y en maximizar los recursos para proyectos de impacto.
Con estas iniciativas, Mayer Mizrachi busca redefinir la administración municipal, apostando por la innovación en la organización de eventos, el fortalecimiento de la seguridad y una mayor inclusión de sectores vulnerables, con la meta de proyectar a Panamá como un destino de celebraciones internacionales.
Fuente: La Estrella de Panamá