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Canadá
La primera ministra de Alberta, Danielle Smith, ha solicitado elecciones federales inmediatas tras el anuncio del primer ministro Justin Trudeau de que renunciará una vez que el Partido Liberal elija un nuevo líder. Smith, conocida crítica de Trudeau, argumentó que "los canadienses necesitan y merecen un primer ministro y un gobierno con un mandato claro otorgado por el pueblo", especialmente ante la amenaza de aranceles por parte del presidente electo de EE. UU., Donald Trump.
En una publicación en X, Smith acusó al Partido Liberal de priorizar sus intereses políticos al paralizar el Parlamento durante el proceso de elección interna de un nuevo líder. "Es uno de los actos más irresponsables y egoístas de un gobierno en la historia de Canadá", afirmó, haciendo un llamado a los parlamentarios para forzar una elección lo antes posible.
Trudeau anunció su decisión el lunes, reconociendo divisiones internas dentro de su partido y asegurando que no está en condiciones de liderar a los liberales en las elecciones previstas para 2025. Mientras tanto, el Parlamento quedará suspendido hasta el 24 de marzo, dejando en el aire el tiempo que tomará a los liberales elegir a un nuevo líder.
Este vacío de liderazgo ocurre en un momento crítico. Trump, quien asumirá la presidencia de EE. UU. el 20 de enero, ha prometido imponer aranceles desde su primer día en el cargo, además de reiterar burlas hacia Canadá, sugiriendo que debería convertirse en el "estado 51" de Estados Unidos.
La incertidumbre generada por la renuncia de Trudeau ha desatado críticas desde diversos sectores políticos. Pierre Poilievre, líder conservador, señaló que los liberales han "roto Canadá" durante sus nueve años en el poder y renovó su llamado a elecciones inmediatas.
“Mientras los liberales, sin líder, se enfocan en salvar sus empleos y pelean entre sí por el poder, el país está fuera de control”, declaró Poilievre en un video publicado en redes sociales.
Por su parte, el exministro conservador James Moore subrayó la gravedad de la situación, afirmando que Canadá enfrenta “un gobierno ausente, un Parlamento cerrado y un gabinete disfuncional en competencia interna” mientras Trump amenaza con aranceles y deportaciones masivas.
El llamado de Smith fue respaldado por otros políticos conservadores, incluida la diputada Rachael Thomas, quien afirmó que "los canadienses quieren una elección ahora". Sin embargo, líderes provinciales como Doug Ford y François Legault adoptaron un enfoque más cauteloso, centrando su atención en la necesidad de evitar los aranceles de EE. UU. Ford destacó la importancia de demostrar “estabilidad y fortaleza” y pidió al gobierno federal que tome medidas urgentes para proteger la economía canadiense.
En contraste, el líder del NDP, Jagmeet Singh, fue contundente al declarar que los liberales, independientemente de quién los lidere, no merecen otra oportunidad.
La renuncia de Trudeau llega en medio de múltiples desafíos, incluyendo el riesgo de aranceles estadounidenses, problemas de asequibilidad, una economía frágil, y conflictos internacionales como la guerra en Ucrania y tensiones en Oriente Medio.
Mientras tanto, los críticos han calificado al actual gobierno como un "gobierno pato cojo", incapaz de tomar decisiones importantes mientras el Partido Liberal se concentra en sus luchas internas.
Los canadienses, ahora, se enfrentan a semanas de incertidumbre, con una transición de liderazgo que podría extenderse justo cuando Trump asuma la presidencia y comiencen negociaciones comerciales críticas entre ambas naciones.
Fuente: The National Post
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