Otra renuncia en el gabinete: Ministra de Ambiente deja su cargo tras ajustes en el gobierno de Nicaragua

Nicaragua

En un lapso de menos de siete días, el régimen de Daniel Ortega ha aceptado la renuncia de otro ministro, en medio de una serie de cambios, reestructuraciones y recortes de personal en las instituciones públicas que han comenzado desde agosto pasado.

Este jueves 12 de diciembre, se oficializó la renuncia de Heyddy Loredana Calderón Palma como Ministra del Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales, según el Acuerdo Presidencial 203-2024 publicado en el diario oficial La Gaceta. Calderón había asumido el cargo en septiembre de 2022.

La misma fuente gubernamental informó que su reemplazo será Javier Antonio Gutiérrez Ramírez, quien asumirá como nuevo ministro de Ambiente y Recursos Naturales, según el Acuerdo Presidencial 2024-2024. Gutiérrez, quien previamente desempeñó funciones como Secretario de Cambio Climático en la Presidencia y como Viceministro del mismo ministerio, ahora estará al frente de la cartera.

Este movimiento ocurre tras la renuncia el 23 de octubre de Martha Verónica Reyes Álvarez, quien ocupaba el cargo de Ministra de Salud desde marzo de 2020, según el Acuerdo Presidencial 183-2024. Reyes, especializada en Epidemiología, tiene una larga trayectoria en el Ministerio de Salud (Minsa).

Cabe recordar que, cuando la doctora Reyes fue nombrada ministra, en abril de 2020, la vicepresidenta del régimen, Rosario Murillo, explicó que el país contaría con tres ministras de Salud. La ministra saliente, Carolina Asunción Dávila, fue reubicada en el cargo de ministra asesora de Ortega para el Sistema Local de Atención Integral en Salud (Silais Managua).

Además, en septiembre, renunció el canciller Denis Moncada, y en junio, el ministro de Hacienda y Crédito Público, Iván Acosta. Ambos fueron nombrados asesores presidenciales tras sus salidas.

Estas renuncias se suman a una serie de cambios administrativos anunciados por Rosario Murillo en agosto pasado, quien explicó que se llevarían a cabo “reestructuraciones” en el aparato estatal para ahorrar recursos, lo que ha generado incertidumbre entre los empleados públicos. Desde entonces, se han reportado despidos y ajustes en diversas áreas de la función pública, aunque no se ha ofrecido claridad sobre el impacto de estas medidas.

Fuente: La Prensa