La revista Forbes ha reconocido a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, como la cuarta mujer más poderosa del mundo. Según la publicación, Sheinbaum ha representado "un punto brillante" en un contexto político global que se ha vuelto cada vez más difícil para las mujeres. En la lista de Forbes, solo tres figuras superan a Sheinbaum: Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea; Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo; y Giorgia Meloni, primera ministra de Italia. En el quinto puesto se encuentra Mary Barra, directora ejecutiva de General Motors, quien es la primera en la lista que no ocupa un cargo en una institución pública.
Cada año, Forbes selecciona a las 100 mujeres más influyentes del mundo, basándose en cuatro criterios: poder económico, presencia en los medios, impacto y áreas de influencia. Las mujeres en este ranking, colectivamente, tienen un poder económico de 33 billones de dólares e impactan a más de mil millones de personas, aproximadamente una octava parte de la población mundial.
Este es el primer año en que Claudia Sheinbaum figura en la lista. En su perfil, la revista destaca que, apenas dos meses después de asumir la presidencia, Sheinbaum se enfrentó al expresidente Donald Trump por sus amenazas de aranceles, posicionándose como una de las primeras y más firmes opositoras a su gobierno. La mandataria mexicana se enfrenta ahora al desafío de mantener el respaldo popular que la llevó a la presidencia.
Sheinbaum asumió la presidencia de México el 1 de octubre de 2024, después de una aplastante victoria electoral con cerca de 35,5 millones de votos, casi el 60% de los electores mexicanos, convirtiéndose en la mandataria más votada en la historia de México. Exjefa de Gobierno de la Ciudad de México y con un doctorado en ciencias, Sheinbaum se convirtió en la primera mujer en ocupar el cargo más alto de la República Mexicana en 200 años de historia.
A nivel global, 2024 cuenta con 26 mujeres al frente de gobiernos, una disminución con respecto a las 38 que ocupaban estos puestos el año anterior. Linda Robinson, experta en Mujeres y Política Exterior del Consejo de Relaciones Exteriores, atribuye esta disminución a los "vientos en contra sistémicos", que incluyen el declive democrático y los efectos de la tecnología viral, desafíos a los que las mujeres líderes deben hacer frente durante las elecciones.
En la lista de este año, figuras como la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, que en años anteriores estuvo entre las primeras cinco, han quedado fuera debido a su derrota frente a Trump en las elecciones estadounidenses, lo que ha afectado su influencia. Lo mismo ha ocurrido con otras figuras prominentes de Estados Unidos, como la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, y la embajadora ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield.
Fuente: El País