El alcalde de Panamá, Mayer Mizrachi, ha compartido un análisis sobre sus primeros 100 días en el cargo, destacando los desafíos que ha enfrentado. Al asumir la alcaldía, encontró una administración en crisis, desorganizada y con más obligaciones que recursos disponibles para atenderlas. Mizrachi enfatizó que su principal objetivo desde el inicio ha sido "organizar la casa", un reto que consideró crucial no solo para su gestión, sino también para el gobierno nacional.
En relación con los ajustes en la plantilla de la alcaldía, el alcalde reveló que ha logrado reducirla en un 50%, lo que evidencia una ineficiencia en la administración anterior. “Pasamos de 6,300 funcionarios a 3,092 en la actualidad. Esto significa que ahora tenemos menos de la mitad de personal que había hace diez años. A pesar de quitarle la mitad de los recursos, la operación sigue funcionando, lo que demuestra que había un alto grado de ineficiencia en el manejo de los recursos”, explicó Mizrachi.
Además, el alcalde expresó su deseo de que la Alcaldía de Panamá se posicione competitivamente en la región. En su búsqueda de mejorar la administración, Mizrachi visitó El Salvador para conocer su sistema operativo. “Es urgente que Panamá se ponga en marcha. Para mañana, ya es tarde”, concluyó.
Fuente: Panamá On