El futuro del Poder Judicial: Renuncias masivas en la Suprema Corte de Justicia



México

El reciente anuncio de la renuncia anticipada de ocho de los once ministros que conforman la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha generado un intenso debate sobre el futuro del Poder Judicial en México. La dimisión incluye a figuras clave como Norma Lucía Piña Hernández, ministra presidenta del tribunal, y otros destacados integrantes como Luis María Aguilar Morales, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Alberto Pérez Dayán, Javier Laynez Potisek, Juan Luis González Alcántara Carrancá y Ana Margarita Ríos Farjat. Esta medida, aunque impactante, no dejará a la SCJN sin miembros de inmediato, ya que los ministros seguirán en sus cargos hasta el 31 de agosto de 2025, asegurando la continuidad en las funciones del tribunal.
                           
El trasfondo de estas renuncias está vinculado a las recientes reformas constitucionales y legales que establecen un mecanismo de elección popular para renovar jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial de la Federación (PJF). Estas reformas, publicadas en el Diario Oficial de la Federación en septiembre y octubre de 2024, buscan combatir la corrupción en el ámbito judicial, pero también han generado críticas por parte de actores del sector, quienes argumentan que la medida afecta la independencia del PJF.




Los ministros que han decidido dimitir han manifestado su negativa a participar en el proceso electoral que se llevará a cabo el 1 de junio de 2025, advirtiendo que esta modalidad de elección judicial constituye una amenaza para la autonomía e imparcialidad del sistema judicial.

Proceso de Renovación

El 1 de junio de 2025, mediante elecciones extraordinarias, se elegirán a los nuevos ministros de la SCJN, así como a magistrados y jueces en diversas instancias del PJF. Los ganadores asumirán sus funciones el 1 de septiembre de 2025. La reforma otorga un “pase directo” a quienes actualmente ocupan estos cargos para postularse como candidatos sin necesidad de evaluación previa, aunque deben manifestar formalmente su decisión de participar o declinar.
Implicaciones de las Reformas

La reforma judicial impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador pretende democratizar el acceso a los cargos judiciales y garantizar mayor transparencia en el PJF. Sin embargo, detractores como la senadora Mayuli Latifa Martínez Simón (PAN) han argumentado que estas reformas representan una invasión de poderes y un riesgo para la independencia judicial. La legisladora incluso interpuso un amparo contra las reformas, que fue admitido y podría frenar temporalmente su implementación.


Por otro lado, el senador Gerardo Fernández Noroña informó que hasta el momento, 580 jueces y magistrados han decidido no participar en las elecciones. Este dato refuerza las críticas de que la reforma podría estar diseñada para favorecer el control político del Poder Judicial por parte del partido en el poder.

En el Senado, la discusión en torno a las renuncias y la reforma ha estado marcada por señalamientos cruzados. Mientras que legisladores del PAN como Ricardo Anaya Cortés acusan al gobierno de buscar el control del PJF, Adán Augusto López, senador de Morena, ha defendido las reformas como un paso necesario para erradicar la corrupción judicial.

Futuro del Poder Judicial

La SCJN enfrenta un periodo de transición que podría redefinir su estructura y funcionamiento. Las renuncias anticipadas otorgan a los ministros el derecho a un haber de retiro proporcional al tiempo de servicio. Además, quienes no resulten electos o declinen participar en el proceso electoral tendrán derecho a una liquidación de tres meses de salario integrado, más 20 días por año trabajado.

Por otro lado, las tres ministras que no renunciaron –Lenia Batres Guadarrama, Yasmín Esquivel Mossa y Loretta Ortiz Ahlf– se postularán para competir por un nuevo periodo en sus cargos. Esto asegura al menos una continuidad parcial en el pleno de la SCJN.

La dimisión de la mayoría de los ministros de la SCJN representa un hecho sin precedentes en la historia judicial de México. Este proceso de renovación, impulsado por reformas controvertidas, plantea grandes desafíos para garantizar la independencia y efectividad del Poder Judicial. En los próximos meses, la atención estará centrada en el desarrollo de las elecciones judiciales y en cómo estas determinarán el rumbo del sistema de justicia en el país.


Fuente: Milenio
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