Venezuela
Edmundo González Urrutia dejó Venezuela este sábado y partió hacia España, el país que le otorgó asilo político, según confirmaron fuentes diplomáticas a El País. El opositor, quien representó a María Corina Machado en las últimas elecciones presidenciales aún envueltas en controversia, se reunió la mañana del sábado con diplomáticos españoles en una embajada europea. Según las mismas fuentes, el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero desempeñó un papel clave en las negociaciones que facilitaron su salida.
La operación que culminó en el asilo de González llevaba en marcha dos semanas. El viernes, en un discurso ante el Comité Federal del PSOE, el presidente Pedro Sánchez calificó a Edmundo de “héroe” y aseguró que España no lo abandonaría ante la persecución judicial impulsada por el chavismo, que lo acusaba de varios delitos. Mientras se organizaban los salvoconductos para su salida segura del país, un avión militar español esperaba en República Dominicana para llevarlo a Madrid.
Del lado del Gobierno venezolano, la vicepresidenta Delcy Rodríguez confirmó la partida de González en redes sociales, asegurando que se otorgaron los salvoconductos “por la paz y la tranquilidad política del país.” José Manuel Albares, ministro de Exteriores de España, declaró que la solicitud de asilo fue iniciativa del propio opositor y no resultado de una negociación con el gobierno de Maduro. Afirmó que España sigue comprometida con los derechos políticos de los venezolanos y no reconocerá una victoria de Maduro hasta que se cumplan las condiciones electorales exigidas.
Aunque no se espera que otros opositores, incluida María Corina Machado, sigan el ejemplo de González por el momento, España ha mostrado disposición a acoger más solicitudes de asilo en caso de presentarse. Más de 100.000 venezolanos ya han sido beneficiados por un régimen especial en España debido a la situación crítica en su país.
Antes de su partida, González había buscado refugio en la residencia del embajador español en Caracas, al tiempo que las fuerzas de seguridad aumentaban la presión sobre la oposición. No respondió a las citaciones judiciales en su contra, argumentando la falta de independencia del poder judicial venezolano.
Hace solo unos meses, Edmundo González era un jubilado de 74 años con una vida tranquila en Caracas, dedicado a sus lecturas y la compañía de su esposa y nietos. Todo cambió cuando María Corina Machado fue inhabilitada como candidata presidencial, lo que lo llevó a asumir una candidatura en un clima de creciente represión política.
Fuente: El País