Chile
La campaña electoral para las elecciones municipales y regionales chilenas, programadas para el 26 y 27 de octubre, comenzó hoy y se desarrollará durante los próximos dos meses. El proceso se desarrolla en un contexto de creciente preocupación por la seguridad y un notable descontento con la política.
La alianza "Contigo Chile Mejor" agrupa a ocho fuerzas de izquierda y centro-izquierda, incluidos los democristianos (DC), en una coalición que une por primera vez a los partidos de la antigua Concertación, el Partido Comunista, y el Frente Amplio. Esta agrupación busca consolidar una oferta de izquierda única, en contraste con la fragmentación en el espectro político de derecha.
En el lado derecho del espectro político, las agrupaciones están divididas. La coalición tradicional "Chile Vamos", formada por Renovación Nacional (RN), Unión Demócrata Independiente (UDI) y Evópoli, competirá de forma independiente. Paralelamente, la ultraderecha está representada por el Partido Republicano y el Partido Social Cristiano, mientras que el Partido de la Gente lidera la derecha populista.
Una novedad en esta elección es el surgimiento del "Centro Democrático", una nueva coalición que agrupa a Amarillos por Chile, Demócratas y Sentido Común. Este bloque está compuesto por exmiembros de la derecha tradicional y democristianos, ofreciendo una alternativa en el centro del espectro político.
Estas elecciones serán las primeras bajo el sistema de voto obligatorio reinstaurado en 2022, después de una década de participación voluntaria.
El foco principal de la contienda se encuentra en la Región Metropolitana, hogar de siete millones de los 19 millones de chilenos. La alcaldesa comunista de Santiago, Irací Hassler, y el gobernador independiente Francisco Orrego, quien cuenta con el apoyo del oficialismo, son dos de los candidatos a seguir de cerca. Además, la incógnita está en si las fuerzas de derecha podrán mantener su única gobernatura en La Araucanía, una región tradicionalmente conservadora.
Las encuestas más recientes indican una ligera ventaja para la oposición con un 54% de las preferencias, mientras que el oficialismo se sitúa en un 41%. Sin embargo, el desinterés por la política y la desafección social desde el fin del proceso constituyente podrían influir significativamente en la campaña, que concluirá el 24 de octubre.
Fuente: SWI