Francia
Cansado del mal clima y la falta de sol, el alcalde de Coulonces, un pequeño pueblo en Normandía, Francia, ha tomado medidas insólitas para mejorar el tiempo. Daniel Marrière, jefe municipal de esta localidad de apenas 216 habitantes en el departamento de Orne, emitió una ordenanza municipal para que pare de llover y solicitó al cura de la Iglesia local y a los clérigos de la zona que pidan ayuda divina para que vuelva el buen tiempo.
La ordenanza de Marrière fue diseñada para levantar el ánimo de los residentes tras un prolongado periodo de lluvias. “Se decreta para el 15 de julio y los meses de agosto, septiembre y hasta octubre, que la lluvia cese y que una ligera brisa y un sol brillante la reemplacen”, proclama el decreto. Además, insta a los sacerdotes a comunicarse con el “más allá” para que el sol vuelva a brillar.
Según la agencia meteorológica Meteo France, la primavera boreal reciente (marzo, abril y mayo) fue una de las más lluviosas desde que se iniciaron los registros en 1959, con algunas regiones de Francia experimentando el doble de lluvia de lo habitual. “El sol fue uno de los grandes ausentes”, afirmó el organismo, lo que llevó al alcalde a intervenir.
“Nunca vi un tiempo así”, declaró Marrière. “Ayer por la mañana, llovía a cántaros, el tiempo estaba gris, apenas se podía ver. Tuvimos que usar la luz durante un tiempo en las casas”. Sobre su inusual ordenanza, explicó: “Lo hice para animarme un poco. Por la mañana llovía mucho y recordé que el alcalde de una ciudad de Francia había emitido una orden similar. Allí me dije que era ahora o nunca hacerlo para poner una pequeña sonrisa en los rostros de mis conciudadanos”.
Marrière también solicitó la intervención divina. “Se pide a los clérigos de las parroquias de la parte norte de Francia que contribuyan a la comunicación con el más allá” y sean “responsables de la ejecución del presente decreto”, indicó.
La noticia del decreto se viralizó rápidamente en toda Francia, llevando al alcalde a ser entrevistado por los principales medios nacionales. Aprovechando la atención, Marrière invitó a todos sus compatriotas a visitar Coulonces durante la fiesta patronal (Saint-Paterne) el segundo fin de semana de septiembre.
Fuente: TN